• Dicen que los sueños expresan en imágenes nuestros anhelos, nuestros deseos... nuestras inquietudes. Siempre has creído que lo que sueñas no es real, ¿estás segur@?
  • Cuando todos duermen, yo sigo despierta... Me gusta la noche… Disfruto con ella. Chicos malos… tened cuidado. ¡Esta zorra anda suelta por la ciudad!
  • El Caribe, cuna de piratas, es un hervidero de actividad. El Lord Arioc, capitaneado por Dagon, surca las aguas de este mar conquistado, indiferente a esas luchas de poder.
  • Valor, coraje y arrojo... Cualidades que definen a Valnelia, una hembra criada en la glymera y nacida para ser una guerrera.
  • Cuando la división entre el mundo humano y el Sheol se reduce a una fina linea entre lo real y lo irreal, un grupo de guerreros se preocupan por mantener el orden.
  • Colección de relatos cortos de diferentes temáticas.

martes, junio 21

Os quiero presentar a alguien…

 
     He titulado así esta entrada porque os quiero presentar a Val, el personaje con el que empecé a escribir y con el que ya llevo tres años.
     Muchas ya la conocéis, me habéis seguido desde el principio, la habéis visto crecer, madurar, ser feliz, sufrir, reír, llorar, divertirse y echar la bronca casi a diario, jajja
     Como comprenderéis, le tengo muchísimo cariño. Con ella aprendí a escribir, a darle forma a todas esas ideas que surgían en mi mente y a expresarlas en palabras. Si no hubiera sido por ella, hoy en día estoy segura que no escribiría nada, porque fue la que me lanzó a este mundo de la escritura.
     Tú y yo llevamos juntas tres años en esta andadura, muchas gracias, Val, por nacer en mi mente y seguir creciendo cada día.
 
 

     Os voy a dejar la ultima escena que escribí, recién salida del horno ayer noche, espero que os guste y sintáis el deseo de conocerla aún más. Porque aunque son varios años escribiendo su historia en un rol conjunto, aún le queda mucho por contar, jajaja
 


La noche no había hecho más que comenzar para ella. El frío golpeaba su rostro mientras se deslizaba en moto por las calles de Caldwell. Había pasado de colocarse el casco, necesitaba con urgencia desprenderse de ese calor que se había hecho dueño de su cuerpo desde hacía horas.
Sentía arder su interior, y sentía como su naturaleza Sharkay reclamaba su propio espacio. Los tatuajes de sus manos al fin se habían fijado a su piel, con su intrínseco dibujo de formas y líneas. No conocía su significado, no entendía los signos, sólo sabía que representaba la pureza de su linaje materno. Aunque… era hermoso a la vista.
Aceleró la Raptor, buscando deshacerse del caos que era su mente; un hervidero de sentimientos; ira, frustración, rabia, dolor… Pero por encima de todos predominaba la venganza. La necesidad primitiva de saciar los instintos insatisfechos.
     Al salir del Spice pensó en visitar el Loup Garou, tomarse otro par de cervezas, buscar un poco de bronca, segura de que allí la encontraría, pero lo pensó mejor. A Circen no le haría ninguna gracia volver a restaurar el local, y de todas formas, no iba a encontrar lo que buscaba. Demasiado alejado del centro y de cualquier zona de actuación de la Sociedad. Y ella deseaba encontrar a uno en especial.
Se acercaba a un semáforo en rojo y redujo la velocidad, pero en el último instante cogió la calle a la izquierda y se desvió. Sólo por puro instinto. Recorrió unos cientos de metros y decidió dejar la moto aparcada en el parking de uno de los locales que había en la avenida.
Comenzó a caminar, siempre alerta.
Destilaba un aura de oscuro peligro que hacía que quien pasaba a su lado acelerara el paso sin apenas mirarla. Ni siquiera atrajo las miradas del grupo de jóvenes que fumaba en la entrada del bar de copas, optando estos por mirar hacia otro lado. Sólo una chica, demasiado joven para estar allí, se atrevió a observarla, y apartó la mirada con rapidez tras soltar un grito bajo de sorpresa.
Val reparó en ella solo unos segundos, alzó la mano y retiró la gomilla que sujetaba su pelo, dejándolo suelto y ocultando su rostro; sus tatuajes debían haberse extendido ya por el lateral de su cara hasta esconderse bajo el cabello.
Sin detenerse, dejó expandirse su poder, buscando su objetivo entre el gentío. Rastrearlos no le llevó más de unos minutos; sus auras negras y cargadas de maldad eran un reclamo para sus sentidos. Metió las manos bajo el abrigo y aceleró el pasó, después echó a correr aferrando las empuñadoras de sus dagas. Sólo estaban a unos metros, y cuando dobló la esquina, los vio entrar en el callejón al que daba la puerta trasera de una discoteca. Pasó de largo al grupo que hacía cola para entrar y rezó para que a ninguno se le ocurriera investigar cuando comenzara la pelea.
Desde la entrada comprobó que eran tres betas. Su frustración se hizo casi palpable al no encontrar al causante de su estado entre ellos, pero estos les servirían de calentamiento. Tenía toda la noche por delante.
Con una sonrisa siniestra, entró al interior haciendo el mayor ruido posible llamando la atención. Cuando se giraron, las vio. Dos vampiras, y por la ropa de marca que llevaban adivinó que pertenecían a la Glymera. La típica escena se recreó en su mente, las imaginó esperando en la cola de la disco para entrar y casi sintió su terror al verlos aparecer por allí. No se les ocurrió mejor idea que la de meterse en un callejón oscuro para desmaterializarse. ¿Pero es que los padres de esas adorables criaturas no sabían inculcarles algo de sensatez? ¿La estupidez era un rasgo contagioso en la Glymera?
Avanzó unos pasos más y dos de los restrictores se giraron hacia ella. Aunque conservaban el color de sus cabellos, habían sido avisados previamente; ninguno pareció sorprendido al verla empuñar las dagas.
—Ocúpate de esas dos —ordenó uno de los que se habían girado para enfrentarla, sin quitarle la vista de encima. Una amplia sonrisa adornaba sus labios.
—Yo me ocupo de esta zorra, B —indicó el otro refiriéndose a ella, sacando su propia arma.
Se lanzó sin mediar más palabras, pero con un salto ágil, Val lo esquivó con facilidad. Descargó la fuerza de una patada en su espalda y lo lanzó hacia adelante unos metros. El arma se le cayó de las manos y golpeó el suelo.
Un grito entrecortado la avisó, se giró con rapidez y lanzó su daga con un movimiento rápido; quedó clavada en la mano del tercer lesser. Éste lanzó un aullido lastimero, soltó una navaja de grandes dimensiones y se sacó la daga de ella mirándola con odio. El tipo había intentado apuñalar a una de las hembras para debilitarla  y así poder llevársela después sin mayor problema. Se desmaterializó ante ellas, cubriéndolas con su cuerpo. Alzó la mano y la daga apareció en ella, dejando sorprendido al restrictor. Al parecer, no le habían hablado de sus cualidades. Mejor, así podría descubrirlas a lo largo de la pelea, y ella estaría ansiosa por enseñárselas.
—¿Valnelia? —susurraron a su espalda.
—Hola, Corín —le contestó sin mirarla, atenta a los tres asesinos que se habían reagrupado a un par de metros, dejando un margen de seguridad entre ellos—. ¿Podéis desmaterializaros? —preguntó, obteniendo el silencio como respuesta.
—Es nuestra noche de suerte —comentó sonriendo uno de los lessers, rubio y de ojos azules, que en algún momento de su vida humana debió ser atractivo, pero que ahora lucía una mirada y una sonrisa cruel que borraba cualquier rastro de belleza que hubiera tenido.
—Malditas glymerosas —susurró ella, apretando con fuerza la empuñadura de sus dagas—. El destino ha querido que nos encontremos de nuevo, Corín, agradece que ésta sí sea tu noche de suerte.
Enfundó sus dagas y las asió por un brazo, desmaterializándose de allí hasta la azotea del edificio que se alzaba ante ellas. Las soltó y se acercó al borde, mirando hacia abajo. Sonrió, los lessers las buscaban con la mirada perpleja. Preparada para saltar, la voz de Corín la detuvo.
—Gracias —susurró.
Val la miró por encima del hombro, la observó durante unos instantes; había perdido esa apostura de seguridad que le recordaba. En su lugar, lucía asustada, despeinada, y un moretón adornaba su mejilla. Sintió lastima de ella, del futuro que le hubiera esperado esa noche si no hubiera decidido cambiar de dirección, y se enorgulleció de lo que era, dándole mentalmente las gracias a su padre. Una vez más…
«¿Gracias?». No había de qué.  
—No lo tomes a mal, querida —le soltó pasados unos  segundos—, no lo hice por ti o por ella —indicó con la cabeza a la otra hembra que aún no había hablado, el terror que sentía no le permitía decir palabra—, lo hice por ellos. No me gustan los mirones cuando peleo, y no necesito a dos hembras lloronas e inútiles que me pongan en peligro.
Asió con fuerza sus dagas y se lanzó desde el alfeizar de la azotea, aterrizando sobre el suelo con el golpe seco de sus botas militares.
—Estoy aquí, chicos, podemos comenzar.

    
    Espero que os haya gustado, y si queréis conocerla un poco más, podéis leer su historia, y la del resto de participantes en la Mansión, en el foro Crónicas Oscuras, que además de escribirse un rol, está dedicado a la novela romántica paranormal en su mayoría.
     Besotesssssssssssss, y gracias por leer.

10 Apasionad@s:

Eli dijo...

Me ha gustado mucho, y gracias por avisar. Cuanto tenga un hueco me pasaré por el foro.

Besos :)

karitha dijo...

me parece conocerla...... pero no estoy muy segura jajajajajajaja

JeCrufer dijo...

A mi me pasa como a ti Kari, no la conozco

Anónimo dijo...

Muy buen aperitivo para conocer a un personaje que ha vivido tanto.

Enhorabuena por esos tres años.

Val Navás dijo...

Muchas gracias, wapas, me alegro que os haya gustado.

No es una escena finalizada, sino que continua hasta desembocar al final de la noche, pero no depende solo de mi en acabar esta pelea, jajaj...

Pronto conoceréis a nuestro querido y mas maléfico resctrictor, Sr. L

Besotessssss

Arwen dijo...

Muchas gracias por visitarme...escribes muy bien..con tu permiso volveré para seguir leyendo tus bellos relatos...besos eternos...

hada fitipaldi dijo...

Un personaje super interesante y bien construido, así como peculiar. Se nota que lo has hecho tuyo por completo. En las novelas que estás publicando en este blog sale? Y el relato es muy bueno. Me gusta tu forma de escribir y de narrar la acción. Me pasaré por el foro. Besikoss

Val Navás dijo...

Gracias a ti, Arwen, espero que lleguen a gustarte. :)


Wenas, hada, en las historias que publico en el blog no sale, solo estoy subiendo cosas escritas con ella en la sección de Crónicas oscuras (aquí en el blog).

De momento solo tengo subida una historia de cuando era adolescente, y que explicarían por qué es como será en el futuro (presente de esta escena).
Es un personaje con el que llevo mucho tiempo, son muchas cosas las que he contado de ella (en la historia rol conjunta que llevamos en el foro), y más que seguiré contando porque no es una historia cerrada, jejeje

Te dejo el link por si te interesa leer la historia corta que subí, esta disponible para descarga.

http://www.4shared.com/document/ohOSqTnm/Huida_Nocturna_-_La_primera_fi.html

Es un personaje que conozco muy bien, sé que quiero de ella y hasta donde puedo hacerla llegar (en esta escena anda algo desquiciada, jajaja)

En el menú de arriba, en Rol Crónicas Oscuras, puedes encontrar las demás historias cortas sobre este personaje que iré subiendo cuando pasen el proceso de corrección (es que las escribí hace tiempo), el vídeo que hice de ella y algunos walls.

Besotes wapaaaaaaa, y gracias por leer.

Shen Mei dijo...

Ve por ellos!!!! ^.^

Val Navás dijo...

Sííííí, tengo que continuar la escena, jijiji

:)) ;)) ;;) :D ;) :p :(( :) :( :X =(( :-o :-/ :-* :| 8-} :)] ~x( :-t b-( :-L x( =))